A los 15 años se mudó a París, la ciudad más importante en el mundo de la moda, dejando temprano la secundaria. Firmó con Elite y pronto desfilaba por las pasarelas con firmas como Dior, Yves Saint Laurent o Giorgio Armani, por citar algunas.
Diane tomó clases de actuación en París y Nueva York, y luego quiso participar en la película de Luc Besson El quinto elemento, pero no pudo pues no sabía hablar bien el idioma francés.
En 2002 y motivada por su entonces esposo, el actor francés Guillaume Canet que actuó en La playa, Diane se introdujo en el mundo de la interpretación y apareció por primera vez en una película, The Piano Player, con Christopher Lambert y Dennis Hopper.
Después de este comienzo, Diane actuó en algunos filmes franceses, como Mi idolo (Mon idole) (2002), Ni a favor ni en contra (sino todo lo contrario) (2003) y 24 horas al límite (2003).
En el 2004 actuó junto a Rose Byrne y Josh Hartnett en el film romántico Obsesión (Wicker Park) en la que se alberga una de sus mejores actuaciones.
Es en el film Troya en que definitivamente es el papel más conocido de Diane es el de Helena en la película de Wolfgang Petersen, Troya (2004) donde trabajó con renombrados actores como Brad Pitt, Orlando Bloom, Sean Bean y Eric Bana.
En 2004 hizo La búsqueda (National Treasure). Su papel en esta película fue un importante impulso en su carrera. Protagonizando la película junto a Nicolas Cage, interpreta a Abigail Chase, quien acompaña a Ben Gates (Cage) y a Riley Poole (Justin Bartha) en la búsqueda de un tesoro en el que se ven envueltos personajes de la historia de Estados Unidos como Benjamin Franklin.
La película tuvo su secuela, La búsqueda 2: El diario secreto (National Treasure: Book of Secrets), en diciembre de 2007. En el 2008 hizo la película francesa Pur Elle, en la que ella es encarcelada por el homicidio de su jefa injustamente.
En el 2009 apareció en el film Malditos bastardos (Inglourious Basterds) de Quentin Tarantino como la sofisticada agente encubierta Bridget von Hammersmark, realizando una interesante actuación junto a Christoph Waltz y Mélanie Laurent y en la que repite y comparte pantalla una vez más con Brad Pitt.
En el 2010 estrenó Inhale y este mismo año Sin identidad junto con Liam Neeson.
Una curiosidad de esta actriz es que habla fluidamente el inglés, el francés y su idioma nativo, el alemán, lo cual le facilita estar presente en el cine de varios países, algo destacable y bastante meritorio.
tampoco es que me emocione mucho, y para mí, no lo digo por ella, Malditos bastardos fue una autentica mierda, con lo fan de Tarantino que era yo... sólo salbaría de ella los diez primeros minutos.
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